Andrés Mateo Rodríguez Sosa fue condenado a 3 años de cárcel por asaltar con lujo de violencia a un taxista, al que incluso desnudo para que no lo persiguiera.
El sujeto es el mismo que intentó violar a una joven en un terreno baldío cercano a Plaza Sendero, donde también la lesionó con una coa en los dedos.
El juez de control Luis Edwin Mugarte Guerrero, en un procedimiento abreviado, también le impuso el pago de 2 días multa y le ordenó que repare el daño de manera abstracta.
Declaró al acusado reincidente, en virtud que cuenta con antecedentes penales en el Nuevo Sistema de Justicia Penal Acusatorio y Oral, por los hechos de Plaza Sendero, por los cuales ya fue sentenciado y purgó la condena correspondiente.
No alcanzó los beneficios sustitutivos de sanciones; lo amonestó y le suspendió sus derechos políticos.
Lo denunciaron el chofer agraviado Oswaldo Uriel Aguayo Euán y José Humberto Novelo Novelo, apoderado general de la ciudadana Lucía María Pech Hu, dueña del taxi.
En los hechos, se señala que el 4 de agosto, aproximadamente a las cinco de la mañana, el taxista se encontraba a bordo del taxi Tsuru con placas 4183-YSB y dos sujetos le solicitaron un servicio en la calle 58 por 71 del Centro.
Uno, que ahora se sabe es el ahora imputado, abordó por la parte trasera y su amigo, actualmente prófugo, en el asiento del copiloto.
Al llegar a la calle 73 entre 76 y 78 el ahora procesado se bajó y le dio un puñetazo en el rostro al chofer, al tiempo que con un pedazo de vidrio lo amagó en el cuello.
El ahora prófugo lo bolseó y despojó de mil 700 pesos en efectivo, producto de su sueldo y de las ganancias de la noche, al igual que de dos teléfonos celulares.
Incluso, el prófugo se apoderó de un maletín con herramientas y las llaves del auto, que también fue objeto de daños por parte de los asaltantes.
No conformes, le clavaron el vidrio en sus costados y le cayeron a puñetazos.
Uno de los asaltantes le pidió al chofer que se quitara los zapatos y la ropa. Después se dieron a la fuga. para luego darse a la fuga, pero el afectado llamó a sus compañeros, que rápidamente ubicaron a Rodríguez Sosa y lo detuvieron con todo y celulares.