Juez libera a los asaltantes de la banda de la Japay

La suerte está del lado de los asaltantes de casas conocidos como “La Banda de la Japay”, porque el juez de control Luis Edwin Mugarte Guerrero suspendió condicionalmente el proceso penal en su contra y decretó a su favor nueve meses de libertad.
Los individuos están acusados de robo calificado cometido con violencia y en pandilla.
Los sujetos beneficiados son Edwin Dioney, Carlos Enrique Euán Bencomo y Emilio Adrián Martín, quienes deberán cumplir una serie de condicionantes para que se dé por concluido el caso.
En la sala 3 del Centro de Justicia Oral de Mérida se llevó a cabo la audiencia para resolver la solicitud de suspensión condicional solicitada por las partes, mediante un escrito en el que solicitaron audiencia al juez de control.
Estuvieron presentes los tres fiscales que llevan la carpeta de investigación, la víctima directa del hecho, los tres imputados y su defensor público.
La defensa solicitó al juez la aprobación de una serie de condiciones: que los imputados permanezcan habitando en el predio en el que viven actualmente y que está registrado ante el juzgado, que no se acerquen al domicilio de la víctima y el lugar de los hechos, no consumir bebidas alcohólicas y acudir a la Fiscalía para que les realicen exámenes para su debido cumplimiento, así como contar con un trabajo lícito y acudir a firmar los primeros cinco días de cada mes a la autoridad que designe el juez.
En su turno, los fiscales solicitaron agregar a estas condiciones que sea comprobado el domicilio donde habitan y que los imputados no puedan acercarse a la víctima y a su domicilio en un radio de 500 metros, y que los sujetos se abstengan de consumir estupefacientes.
Al analizar las solicitudes, el juez Mugarte Guerrero añadió la condición de que los imputados no posean ni porten armas, y tras preguntarles a los imputados y a la víctima si estaban conscientes de esta suspensión y si estaban de acuerdo, cerró el debate, analizó y autorizó la suspensión condicional, y les mencionó a lo imputados que, en caso de que se compruebe que no están cumpliendo las condiciones, los fiscales pueden solicitar una audiencia para seguir con el proceso penal ordinario correspondiente.
El caso ocurrió el 30 de enero de 2015, cuando los tres sujetos se introdujeron en un predio en la colonia Fidel Velazquez, donde amagaron con un cuchillo a una mujer y sustrajeron diversos bienes, los cuales, desde la detención, fueron devueltos a sus propietarios y por eso no se les sancionó severamente.