En lo que va del año, 214 vehículos particulares han sido trasladados al corralón por ofrecer servicios de traslado sin el permiso respectivo de las autoridades.
La mayoría de las unidades corresponden a la plataforma Uber, aunque también hay particulares y de otras compañías de taxis piratas.
El director de la Dirección de Transporte, Humberto Hevia Jiménez, informó que de los 214 detenidos, 139 guiadores se han acercado a la DTY para arreglar su situación mientras que otros 75 no lo han hecho.
Ya fueron liberados el 10 por ciento, mientras el resto está en ese proceso.
La ley establece a quienes ofrezcan el servicio de transporte sin concesión o constancia, multas que van de los 50 a 500 salarios mínimos, unos 40 mil pesos aproximadamente.
En la primera detención no se aplica la multa más alta, pero si hay reincidencia entonces si se infracciona con el tope máximo.
En el aeropuerto, en lo que va del año se han infraccionado una decena de vehículos de Uber por prestar servicio ilegal, aunque las multas en ese lugar están a cargo de la Policía Federal.
Como informamos, Uber es la única compañía dedicada al traslado de personas que no se ha regulado en Mérida, donde hay otras cuatro empresas que prestan el servicio de plataforma.