En cumplimiento de una orden de aprehensión, Álvaro Diego Escalante Peraza y su hijo Luis Alejandro Escalante Magaña, de 57 y 29 años de edad, fueron detenidos por la Policía Ministerial por vender un terreno en la playa y no entregarlo.
La denuncia por fraude fue interpuesta por Eliud Alejandro Borges Massa.
De acuerdo con el expediente, padre e hijo ofrecieron en venta un terreno ubicado en Chicxulub Puerto en 300 mil pesos, pero cuyas escrituras nunca fueron tramitadas, ya que estaba hipotecado.
Los hechos se suscitaron en abril del 2011, luego de que Escalante Peraza contactó al agraviado al enterarse que estaba interesado en adquirir una propiedad por la zona de Chicxulub, en donde su hijo (Escalante Magaña) tenía un predio, el cual en un principio ofrecieron en 350 mil pesos.
Después de visitar el lugar y manifestar que pensaría en la oferta, Borges Massa fue contactado por los vendedores a finales de ese mismo mes para convencerlo de adquirir el terreno, que luego de una negociación le dejaron en 300 mil pesos.
El afectado asentó en su denuncia que para cerrar el trato dio un primer abono de 50 mil pesos y en meses posteriores aportó diversas cantidades de dinero, hasta sumar la cifra requerida por padre e hijo, recibiendo a cambio los recibos correspondientes.
Una vez liquidado el pago total de la propiedad, en el mes de septiembre del mismo año, el comprador intentó contactar a los inculpados para la firma de las escrituras, pero al no localizarlos contrató los servicios de un abogado, a fin de que adelantara los trámites, quien le informó que era imposible la venta del terreno, ya que éste se encontraba hipotecado.
Luego de constantes intentos por localizar a los vendedores, Borges Massa dio con ellos y les pidió una explicación sobre la situación del predio, a la vez que les solicitó la devolución de su dinero, pero al no serle devuelta suma ni entregársele el predio, interpuso la denuncia penal en su contra y derivó en la orden de aprehensión.
Padre e hijo fueron puestos a disposición del Juez Octavo Penal, tras ser detenidos en el fraccionamiento Francisco de Montejo.