Luego del asalto a una mujer de la tercera edad en su casa del barrio de San Cristobal, en el primer cuadro de Mérida, agentes de la Secretaría de Seguridad Pública habrían detenido a uno de los delincuentes.

El sospechoso fue detenido cerca de ese barrio, pero presuntamente no se le halló el botín, consistente en valiosas joyas y dos millones de pesos en efectivo, según versiones no confirmadas por la autoridad.

El atraco fue perpetrado por dos sujetos, aunque el cómplice del detenido permanece prófugo, con el botín en su poder.

Según se informó, la víctima es propietaria de la funeraria «Garrido», ubicada en la calle 50 entre 73 y 73-A del centro.

La familia de la víctima cree que al menos uno de los asaltantes trabajó en la funeraria, toda vez que sabía muy bien dónde se encontraba el dinero, ya que al irrumpir en la casa, se dirigieron hacia el mueble donde la familia resguarda valores.

La señora, de 92 años,  fue sometida y amarrada por los delincuentes. Una vez liberada fue llevada a un hospital, pues sufrió una crisis nerviosa.

La mujer vive con sus dos hijas frente a la funeraria, pero estaba sola porque ellas salieron a realizar unos trámites relacionados con la funeraria.