Por problemas familiares, Lorena del Carmen González Fernández inventó que había sido secuestrada. . En realidad sola y por su propia voluntad se trasladó a Valladolid y se alojó en un hotel; antes llamó por teléfono a su familia para decir que gente armada la había plagiado.
Ante esa versión, que ahora se sabe fue producto de la imaginación de la mujer de 51 años de edad, se desplegó un amplio operativo conjunto por parte de la Secretaría de Seguridad Pública y la Policía Ministerial de la Fiscalía General del Estado, desde el primer momento hasta su localización.
Elementos policiacos la hallaron este sábado a las cinco de la mañana en una terminal de autobuses de Valladolid y para resguardarla la trasladaron al edificio de la SSP en Mérida.
Entrevistada por personal policiaco, en presencia de un médico y un psiquiatra de la Corporación, para conocer información relacionada con su presunto rapto, la mujer confesó que estaba mintiendo y que todo lo había inventado.
“Estaba muy deprimida y necesitaba encerrarme”. Dijo que agobiada por constantes conflictos con su pareja, decidió crear la historia del secuestro, cuando en realidad lo que hizo fue abandonar el automóvil que conducía en el estacionamiento de un supermercado en Mérida, después de haber acudido al CREE a terapia de rehabilitación en un hombro, aproximadamente a las 10:30 horas de ayer.
Enseguida tomó un camión urbano hacia el centro, abordó un autobús en la terminal del ADO, y una vez en Valladolid se hospedó en el hotel “María de la Luz” donde pagó con su tarjeta de débito. Siempre sola.
En su bolso de mano llevaba medicamentos que consume: antipsicóticos, antidepresivos y antihipertensivos.