La falta de capacidad en la dirección e la Policía Municipal de Mérida ha quedado de manifiesto nuevamente luego de que la corporación policíaca realizara un polémico operativo para retirar a un grupo de prostitutas del parque de San Cristóbal.

El operativo, a todas luces violatorios de los derechos humanos, lo realizó la Policía de Mérida a fin de que las falenas no “ofendieran” con su presencia a la “Virgen de Guadalupe”, patrona de la Iglesia de ese barrio y a la que se festejó este día.
Más de 10 prostitutas fueron subidas a camionetas antimotines y expulsadas del sitio previo a la noche de los festejos a la virgen, según se informó, por órdenes del director de la PMM, Arturo Romero Escalante.
Los agentes no guardaron las formas para realizar esta expulsión, aunque inicialmente trataron de convencer a las mujeres que se fueran pro las buenas.
Los policías les ofrecieron “una tregua” para que abandonaran voluntariamente el lugar antes de los festejos a la Virgen de Guadalupe y regresaran luego, cuando “la cosa esté tranquila”.
Las mujeres expulsadas dijeron que los policías les dijeron que su presencia ofendería a quienes acudirían martes y miércoles a venerar a la Virgen, por lo que debían de irse por las buenas o por las malas.
En el grupo había también algunos travestidos, quienes igualmente fueron subidos a las patrullas y sacados del lugar.
Se desconoce si fueron remitidos a los separos o solamente expulsadas del sitios, aunque la polémica medida ha despertado diversos comentarios negativos entre varios sectores de la sociedad, pues legalmente no está prohibida la prostitución porque es difícil de comprobar el hecho cuando se está consumando.
El director de la PMM, Cmdte. Romero Escalante se ha visto envuelto en varios escándalos en las ultimas horas, ya que ayer se divulgó que él y dos de sus colaboradores están bajo investigación de la Policía Federal por su presunta protección a distribuidores de piratería en el centro.