Aunque fue acusado de fingir un asalto para quedarse con poco más de 873 mil pesos, el diligenciero Marcos Manuel Martín Martínez recobró su libertad con pagar tan sólo $10,000.

El juez de control Rómulo Antonio Bonilla Castañeda consideró que podía regresar a la calle y que para garantizar que no se evada de la acción de la justicia, dispuso que el sujeto use un localizado electrónico.

Además le impuso que acuda a firmar ante el Centro Estatal de Medidas Cautelares, que sea sometido a vigilancia, no salir del Estado y, desde luego, que deposite 10 mil pesos.

Todo indica que el dinero se recuperó, al menos una cantidad importante, y de ahí que solo se le fijara el pago de $10,000 para recuperar su libertad.

Como informamos ayer, Martín Martínez fue imputado por el delito de abuso de confianza, toda vez que simuló un asalto cuando iba a depositar 873,664 pesos propiedad de la concesionaria de automóviles Hyundai, para la cual trabajaba como diligenciero.

Los hechos ocurrieron alrededor de las 10:30 horas del 13 de diciembre pasado, cuando iba a depositar esa cantidad de dinero y ocho cheques.

A las 14 horas, regresó a las oficinas diciendo que fue asaltado a las 11:30 de la mañana, señalando que sólo le robaron el dinero en efectivo que traía, no así los cheques, como tampoco su teléfono celular, su billetera, ni la otra mochila que tenía.

Cuando lo cuestionó el gerente administrativo Oscar Arturo Betancourt Cetz, por qué no dio aviso a la policía, si en ese momento contaba con celular y se encontraba cerca de una gasolinera, señaló que se aturdió.

También cuando le preguntó por qué si lo asaltaron a las 11:30 horas, no les avisó sino hasta las 14 horas, volvió a decir que se aturdió.