Cristian Mauricio Narváez Medina, detenido por pintar grafitis en varias partes del pasaje “Emilio Seijo”, tuvo que pagar $3,100 por su irresponsabilidad y de esta forma recuperar la libertad.

El joven, de 19 años, fue encarcelado junto con un amigo suyo, menor de edad, luego de que causaron daños en paredes de negocios, en bancas y en un monumento de ese pasaje.

Narváez Medina fue remitido al Juzgado Tercero Penal, acusadod e daño en propiedad ajena.

El expediente indica que el sujeto, el menor C.A.M.W. y otro jovencito que logró escapar, acudieron a un evento de grafitis en el fraccionamiento Juan Pablo II.

En el lugar consumieron cervezas y luego fueron al pasaje, donde realizaron las pintas, pero fueron detenidos por agentes de la Policía Municipal de Mérida en horas de la madrugada..

Al dar su testimonio en el Juzgado, Cristian Mauricio dijo que estaba con sus amigos  en la Plaza Grande esperando a que los camiones urbanos iniciaran sus viajes y él entró a una tienda a comprar  una sopa instantánea, pero  al regresar con sus amigos, éstos ya no estaban.

Al poco rato llegaron sus cuates, pero acompañados de los policías y lo detuvieron.

Dijo que no pintó ninguna pared y consideró que posiblemente fue Saúl, el prófugo, pues éste concursó en el evento de grafitis y ellos solo observaron.

Según el reporte policíaco, pintarrajearon la piedra del Pasaje, la cortina de un comercio y paredes de otros.

Al final de cuentas, sus familiares tuvieron que pagar los $3100 para recuperar su libertad.

El otro detenido, el menor de edad, fue remitido ante un juez especial. (Acom)