Militares mexicanos detienen y desarman a dos soldados «gringos» en EE.UU.

Varios militares armados de la Armada Mexicana detuvieron la semana pasada a dos miembros del servicio estadounidense que vigilaban una zona cercana la frontera que separa a ambos país.

Según contaron los funcionarios de Defensa de EE.UU. a la cadena CNN, cinco o seis militares mexicanos los desarmaron y les apuntaron con sus armas mientras los interrogaban.

El incidente ocurrió el pasado 13 de abril en las cercanías de la ciudad fronteriza estadounidense de Clint, Texas, donde la cerca, al parecer, no coincide claramente con el borde que separa ambos países debido al lecho seco del Río Bravo (o Río Grande, en EE.UU.) que separa Texas del estado mexicano de Coahuila.

Según admitieron los propios soldados norteamericanos, la ubicación de la valla no coincide con la frontera geográfica, lo que a menudo crea confusión.

Para que evitar una escalada de la tensión, los detenidos no opusieron ninguna resistencia y actuaron conforme al protocolo. Los uniformados norteamericanos lograron explicar la situación a las tropas mexicanas gracias a que uno de ellos dominaba el español y fueron liberados.

La investigación posterior de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de EE.UU. confirmó que los funcionarios estadounidenses no habían abandonado el territorio de su país.

Hasta el momento, las autoridades de México no han emitido ningún comunicado oficial sobre lo sucedido.