Mérida, Yucatán, 10 de agosto de 2019.-Miguel Ángel “El Negro” Gutiérrez Machado, quien mañana domingo aspira a seguir moviendo los hilos de su partido, el PAN, busca un lugar en el Consejo Político Estatal con miras a las elecciones de 2021, en las cuales busca perfilarse para regresar por un mayor y jugoso puesto.

Astuto, polémico, calculador, traicionero, corrupto, aprovechado y manipulador son algunos de los calificativos que se ha forjado a lo largo de su desempeño en la política que inició en la primera administración panista de Mérida como director de Desarrollo Social y Comunitario siendo alcaldesa Ana Rosa Payán Cervera.

Autor intelectual de la llamada “Tormenta Panista”, -la primera división interna pública en el PAN- el “Negro” Machado compitió por primera vez para ser presidente del Comité Municipal de Mérida enfrentándose a una de las figuras más simbólicas del panismo, Roger Cicero Mackinney; a la postre, futuro suegro de Patricio Patrón Laviada.

Durante el gobierno municipal de Xavier Abreu Sierra, ya como presidente del CDM panista, también tuvo el cargo de Director de Gobernación, cargo que también tuvo que dejar bajo acusaciones de corrupción en el área de Espectáculos y también en Comisarías, siendo jefe del área Aldo Díaz Novelo.

Su pasión por los negocios al amparo del poder se reveló desde que fuera diputado federal e integrante de la Comisión de Medio Ambiente, abriendo un despacho para otorgar permisos ambientales a la industria hotelera y restaurantera de Quintana Roo, gracias a sus influencias con el secretario Víctor Lichtinger.

Desde ese cargo financió buena parte de la campaña de Ana Rosa Payán Cervera para un segundo período. En ese lapso, el “Negro” siguió controlando el área de mercados municipales y dio inicio a la llamada era de los tianguis en Mérida, una operación para obtener recursos ilimitados utilizando los espacios públicos destinados al recreo de los meridanos para obtener grandes ganancias y al mismo tiempo controlar el ambulantaje en el Centro Histórico.

Sin duda, sus ansias de poder lo han llevado a ser un fiel seguidor de la doctrina maquiavélica que dice “el fin justifica los medios” y no ha dudado en traicionar a su propio partido, como lo hizo en 2010, cuando operó en favor de la candidata del PRI, Angélica Araujo Laura, para que llegara a la alcaldía meridana.

En esa elección la candidata del PAN fue Beatriz Zavala Peniche, del grupo de su enemigo Patricio Patrón Laviada.

Dicha traición le fue recompensada en 2012, cuando de nuevo buscó la candidatura de su partido a la alcaldía de Mérida, abanicado o apadrinado, según se dijo, por el PRI a través de Gaspar Quintal Parra, oficial mayor del ayuntamiento de Angélica Araujo Lara. En esa ocasión el candidato resultó Renán Barrera Concha, quien después ganó la alcaldía meridana.

Se dice que en compensación, Barrera Concha lo premio con un cargo en el ayuntamiento desde donde operó lo relativo al ambulantaje y los tianguis y sacando grandes ganancias con los permisos y derechos de piso, dejando toda esa situación en completo desorden.

Se calcula que durante la administración de Barrera Concha el número de tianguistas en Mérida se elevó a más de 400 sin que existiera un solo padrón de tianguistas ni una relación de espacios públicos donde se instalaran este tipo de comercios.

Para “El Negro” Machado el negocio era doble: la renta de piso por metro cuadrado subió a más de $23 pesos por metro cuadrado. Pero el verdadero filete del negocio consistía en la renta obligatoria de toldos a los tianguistas lo cual generaba ganancias ilimitadas, especialmente en los parques más grandes ubicados en zonas populares como el de la Serapio Rendón, o el de Polígono 108.

Los tianguistas también eran obligados a pagar servicio de limpieza, luz, baños, servicios que en la mayoría de los casos no se prestaban, lo cual dejaba a los espacios públicos en condiciones insalubre e inseguras.

Todas estas ganancias eran administradas por el “Negro” Machado sin que un solo peso entrara a la Tesorería Municipal, violando el artículo 98, fracción I, inciso e, de la Ley de Hacienda del Municipio de Mérida.

Con el regreso de Renán Barrera Concha a la alcaldía, el “Negro” ya inició de nuevo este negocio: recientemente, los tianguistas que participan en la venta de autos en la Central de Abastos señalaron que ahora ya reciben presiones de este personaje que afectan sus actividades.

Acusan a Gutiérrez Machado de elevar el precio del servicio de sanitarios, les quitó la vigilancia los sábados por la noche y, a los vendedores ambulantes, se les impidió el paso y los replegaron a un sitio cercano a la entrada. Tal parece que su intención es acabar con ese tianguis o sacar algún provecho para él.

Con el cambio del Comité Directivo Municipal de Mérida, de nuevo Gutiérrez Machado ve la oportunidad de posicionarse para tratar de influir en la selección de candidatos para las elecciones de 2021, cuando se elegirán diputados y alcaldes.

El “Negro” Machado, quien apoya la candidatura de Josué Camargo Gamboa, exdirector Planeación y Gestión del Ayuntamiento de Mérida, ve en ese cambio una oportunidad que no puede dejar pasar para seguir con sus negocios.