CIUDAD DE MÉXICO, MX.- México es uno de los países con mayor número de diabetes y obesidad, enfermedades que en cierta parte, de acuerdo con la Alianza por la Salud Alimentaria (ASA), son generadas en gran medida por el alto consumo de refrescos y comida chatarra, publicó publimetro.com.mx.

Esto ha provocado que México se convierta en una nación vulnerable frente al COVID-19, pues generalmente al año mueren 40 mil mexicanos a causa del consumo de estas bebidas, el 57% de ellas relacionada con diabetes y 33% con enfermedades cardiovasculares.

En Yucatán, el consumo de bebidas azucaradas está entre los más altos del mundo. La Secretaría de Salud calcula que cada año en el estado se consumen en promedio 163 litros de dichas bebidas, lo que equivale a 446 mililitros por día, es decir, un poco más de una lata de bebida.
Aunque algunos yucatecos pueden incluso consumir hasta litro y medio al día.

El aporte aproximado de kilocalorías (Kcal) de 445 ml. de refresco es de 187, que cubre casi el 10 por ciento del aporte de energía en una dieta estándar de 2000 kcal. Su consumo puede representar casi nueve cucharaditas de azúcar y se considera como factor de riesgo para el desarrollo del sobrepeso y la obesidad,los que predisponen a padecer diabetes melllitus tipo 2 e hipertensión arterial, enfermedades metabólicas que presentan altos índices en Yucatán.

De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), no se recomienda consumir por día más de 50 gramos de azúcar, es decir, 10 cucharaditas cafeteras.

Consumir una bebida azucarada de 355 ml., gaseosa o no gaseosa, significa consumir alrededor de siete cucharaditas de azúcar. Las aguas frescas también pueden proporcionar más azúcar que la que recomienda la OMS

Ante este riesgo que implica a la salud, la ASA recomienda la reducción del consumo de dichos productos con el objetivo de reducir el aumento constante de sobrepeso y obesidad, además de que a largo plazo ayuda a fortalecer el sistema inmunológico, lo cual podría representar una ventaja ante el COVID-19.

La aclaración por parte de la Alianza por la Salud Alimentaria surgió tras un comunicado emitido por parte de la Asociación Nacional de Productores de Refrescos y Aguas Carbonatadas (ANPRAC), en el que aseguran ser una industria responsable explicando que el 55% de sus productos son bajos en calorías o en su defecto, sin calorías.

Lo cierto es que de acuerdo con la ASA, dichos fundamentos son falsos, ya que posteriormente la Alianza por la Salud Alimentaria emitió un comunicado que explica los siguientes puntos.

“Las declaraciones realizadas por la ANPRAC corresponden a una estrategia de maquillaje para hacerse pasar por industrias preocupadas por la salud de los mexicanos en un momento en que se ha demostrado, una vez más, el grave daño que ha generado en la población mexicana”

No solo tienen una gran responsabilidad en las epidemias de obesidad y diabetes, la tienen claramente en el debilitamiento del sistema inmunológico frente al COVID-19”

“En medio de la pandemia por COVID-19 y en donde los mexicanos tienen uno de los mayores consumos de refrescos a nivel mundial, es fundamental que la población esté informada sobre los daños que ocasiona a la salud el consumo de bebidas azucaradas y comida chatarra, y que, por otro lado, puedan contar con acceso a a agua potable y a una alimentación basada en alimentos frescos”, explica la ASA. (Fuente: publimetro.com.mx)