Dos individuos fueron hallados muertos en el patio de una vivienda en la colonia García Ginerés, en los límites con San Damián.

Un albañil que estaba trabajando en un predio cercano se percató de los cadáveres, los cuales estaban con manchas de sangre y tenían la cara teñida con pintura blanca.

Se sospecha de un doble asesinato, aunque al parecer los vecinos no escucharon ningún ruido que delatara al criminal o los criminales.

En esa zona viven personas que se dedican al «tiroteo» de droga. Cerca de ahí fueron detenidas las «narco abuelas», es decir, mujeres ya mayores que se dedicaban al narcomenudeo.