Declaran inocente a marido que mató a su rival de amores

Por considerar que actuó en defensa propia, el Tribunal Primero de Enjuiciamiento absolvió  Bernabé Balam Uc (a) «Torero» , quien diera  muerte a su vecino al que presuntamente sorprendió intimando con su mujer. 

Lo mató a puñaladas, pero los Integrantes del Tribunal dictaron fallo absolutoria aún cuando la Fiscalía sostuvo que el ahora absuelto fue quien sacó inicialmente el cuchillo y se lo clavó a la víctima en el pecho. 

Sin  embargo, los jueces consideraron que el que llevaba el arma era el ahora occiso y fue quien quiso ultimar a «Torero» , de manera que éste actuó en legítima defensa. 

Los hechos tuvieron lugar en horas de la madrugada del 12 de noviembre de 2019, en Teya, cuando «torero» mató a Felipe Eleuterio Uicab, de 40 años, tras lo cual se entregó a las autoridades. en legítima defensa.

Según el veredicto, el acusado dormía en su domicilio cuando llegó el ahora occiso armado dispuesto a matarlo, pero no pudo porque despertó, forcejearon, logrando «torero» quitarle el arma y con ella matarlo. 

A esa conclusión llegaron los jueces durante el desahogo de pruebas, pues el acusado demostró que él dormía en su casa, de manera que no provocó los hechos. 

En el pueblo, el día de los hechos se dijo que Uicab Iuit entró a la casa de “Torero” cuando éste dormía, y se dirigió al cuarto de la esposa de su vecino, Reina Z. M., pues la pareja dormía en habitaciones separadoas. 

Sin embargo, en el momento en que el primero tenía relaciones sexuales con Reina fue sorprendido por el marido, quien momentos antes se había levantado a tomar agua.

“Torero” había despertado al sentir sed y al levantarse para ir a tomar agua a la cocina oyó risas y murmullos. Al acercarse al cuarto de su mujer y encender la luz vio lo que pasaba, de manera se dirigió a la cocina, tomó un cuchillo, entró al cuarto y le clavó el arma varias veces en el abdomen del presunto adúltero.

Como pudo Uicab Iuit huyó a su casa, pero no logró entrar porque las heridas acabaron con su vida.

La hija del agredido, una menor de 16 años de edad, oyó el alboroto y al salir encontró a su padre cerca de la puerta. De inmediato pidió ayuda al Palacio Municipal.

El comandante de la Policía Municipal, Daniel Dzul, interrogó al presunto asesino, quien se entregó y confesó los hechos, así que lo detuvo y remitió a la cárcel.