Durante su participación del pasado viernes en el programa “Sale El Sol”, donde funge como colaboradora desde hace un tiempo, Talina Fernández, de 76 años, narró su experiencia sobrenatural.

Según la presentadora el acontecimiento ocurrió a finales de la década de los años 70, luego de que ella entrevistó a un famoso ilusionista y psíquico de origen israelí-británico.

“En algún momento de mi vida, en 1977, vino a México Uri Geller (…) Lolita Ayala y yo condujimos un programa y éramos las traductoras (…) A mí me curaron en el Ajusco unos hombres alienígenas (…) Yo estaba tan preocupada con la traducción que no le pregunté [cómo lo hicieron]”, refirió la madre de la fallecida Mariana Levy.

Talina Fernández contó que una de sus amigas fue curada por unos hombres y, al preguntarle cómo había sido todo, ella le pasó el contacto de un misterioso sujeto.

La “Dama del Buen Decir” expresó que antes de su cita con el individuo, ella se lastimó gravemente la rodilla; por esa razón tuvo que asistir lesionada a la entrevista que ya tenía pactada.

La conductora de “Sale El Sol” acudió a dicho encuentro con su esposo y otras dos personas. Todos fueron trasladados a bordo de un vehículo sin ventanas a un sitio que ella identificó como parecido al Ajusco.

“Llega el hombre rojo y nos dice ‘síganme’, entonces nos vamos en una Palmer sin ventanas. Nos vamos bien y de repente llegamos, me bajo y México estaba abajo. Puede haber sido el Ajusco, puede haber sido… no sé”, expresó Talina Fernández.

“Pasamos por un taller de vestiduras de coche y entramos a una casa humilde donde estaban dos hermanos con jorongos, un pizarrón y un cuarto con aproximadamente 20 hombres de negro”, detalló.

La mujer expresó que tras una charla ella les pidió a los sujetos de jorongo que le mostraran sus capacidades; sin siquiera tocarla, ellos lograron “operarle” la rodilla y aliviaron la grave lesión que presentaba.

Cuando Talina Fernández solicitó que le enseñaran cómo curar de dicha forma, ellos le propusieron un horario matutino; sin embargo, por cuestiones laborales ella intentó negociar otros momentos del día.

Ante esa situación, los individuos le refirieron que no estaba preparada y le pidieron que se fuera del lugar junto a sus acompañantes, por lo que el hombre rojo procedió a desalojar a todos.