El caso de Antonio Riaño parece sacado de un guion cinematográfico sobre impostores. Tras dos décadas de evadir al FBI y a la justicia de Ohio, su captura en agosto de 2024 reveló una ironía asombrosa: el hombre buscado por asesinato en Estados Unidos se había convertido en policía municipal en su natal Oaxaca.

El Incidente: En diciembre de 2004, en el bar «Roundhouse» de Hamilton, Ohio, Riaño (entonces de 52 años) se vio involucrado en una pelea con Benjamín Becerra, de 25 años.

La Evidencia: Las cámaras de seguridad del bar captaron el momento en que Riaño le disparaba a Becerra. Tras el crimen, la policía registró la casa de Riaño y encontró el arma homicida oculta bajo el piso de su baño. Sin embargo, antes de ser arrestado, Antonio huyó del país.

Ahora se sabe que se ocultó en Oaxaca, donde incluso se enroló como policía municipal.