Modernos piratas, vestidos incluso como integrantes de las fuerzas armadas de México, irrumpieron violentamente en el puerto de abrigo de Telchac, donde sustrajeron varias embarcaciones que posteriormente fueron recuperadas en el mar.
El asalto ocasionó intensa movilización de los cuerpos de seguridad del estado, encabezados por la SSP y con apoyo de la Marina y el Ejército, que se coordinaron para buscar por mar y tierra a estos delincuentes, que según fuentes de los puertos operan en alta mar, donde asaltan a los pescadores.
Esta banda estaría relacionada con los recientes robos de motores y embarcaciones, y según versiones son fuereños llegados desde el vecino estado de Quintana Roo.
En una de las lanchas recuperadas, que recaló en Río Lagartos, se encontraron, además de un motor fuera de borda de 250 HP desmantelado, chalecos antibalas, fornituras, ropa tipo militar, así como llaves de diversas medidas que utilizarían para desmontar los motores, pasamontañas y una cizalla.
Junto a un bidón de combustible estaba un cartucho útil de un arma de grueso calibre, lo que confirma las versiones de que los pepineros furtivos y los ladrones de motores utilizan armas largas para cometer sus ilícitos.

Sin embargo, se reforzó el operativo,  se utilizó también el helicóptero de la SSP, que estuvo realizando sobrevuelos desde Telchac hasta la zona de Río Lagartos.
Por tierra las revisiones incluyeron a ranchos y caminos rurales. Por mar los patrullajes incluyeron también la zona conocida como Bocas de Dzilam, donde según pescadores desembarcaron algunos de los individuos para internarse en el monte.