A fin de evitar una sanción de 50 años de cárcel por feminicidio, el campechano Raúl García Barrientos (a) “Fibrero” admitió haber asesinado a su cuñada, con lo que la pena será de solo 18 años de prisión.
Prácticamente “negoció” su sanción, aceptando el procedimiento abreviado, con lo que él se queda con una sentencia baja y la autoridad se ahorra tiempo y esfuerzo, pues ya no habrá necesidad de ir a juicio oral y reunir pruebas.
Para ello, García Barrientos confesó haber matado de dos puñaladas a su cuñada, cuando ésta salió en defensa de su hijo menor de edad.
Este jueves concluirá el proceso, cuando se le dé a conocer oficialmente la sanción a la que se hará acreedor.
Si se hubiera ido a juicio y se acreditaba el feminicidio hubiera recibido 50 años de prisión, pero en el Nuevo Sistema de Justicia Penal este tipo de beneficios está previsto incluso para los asesinos.
García Barrientos tendrá que pagar por concepto de reparación del daño ocasionado, aunque esto se definirá durante la lectura de la sentencia.
Fue imputado por el delito de homicidio calificado, tras los hechos registrados el 23 de marzo pasado en Celestún, mismos que fueron denunciados por Yolidabell y Francisco Hernández Sosa.
María Eloisa Hernández Carmona, de 42 años, murió como resultado de alteraciones tisulares y viscerales de una anemia aguda post-hemorrágica, debido a la perforación de la víscera cardiaca por herida con arma blanca.
Fue apuñalada en la calle 4 entre 25 y 25-A de la colonia Puerto de Abrigo, de Celestún.
La mujer fue sujetada por la espalda y luego atacada con el cuchillo, que le fue clavado en un par de ocasiones.
Un día antes, el sujeto, de 41 años de edad, pretendió acuchillar a un hijo menor de la mujer y al no lograrlo, se emborrachó y al día siguiente fue a buscarlo.
La mujer le salió al paso y él la asesino. Ahora, en vez de 30, 40 o 50 años de cárcel, se llevará 18.
El acusado es oriundo de Sabancuy, Campeche, y llegó a Celestún dos meses antes del crimen, para trabajar como pescador.