Presión social obliga a Vila a reinstalar a empleado con discapacidad

La presión social obligó al ayuntamiento de Mérida, que encabeza Mauricio Vila Dosal, a dar marcha atrás en el despido de un empleado municipal con discapacidad auditiva y de lenguaje, que además padeció varios meses de acoso laboral y al final fue despedido hace unos días por el director de Tecnologías de la Información, Ricardo de Jesús Torre Rodríguez.

La noticia corrió como reguero de pólvora y generó comentarios adversos contra la recién iniciada administración de Vila.

En un comunicado del que no nos enviaron copia, el coordinador de los regidores del PAN, Mauricio Díaz Montalvo, indicó que todo se debió a un mal entendido porque esta persona sigue en su mismo puesto y con los mismos derechos laborales.

Esto significa, señaló el edil panista, que el referido empleado seguirá cobrando como lo ha hecho anteriormente sin contratiempo alguno.

Ayer publicamos que Torre Rodríguez corrió al empleado con discapacidad con el argumento de que “no hay dinero para pagarle porque hay una crisis en México y se tiene que reducir personal”.

La víctima del acoso laboral es Abraham Alexander Ayuso Cambranis, quien padece discapacidad auditiva y de lenguaje y es empleado del Ayuntamiento de Mérida desde 2011 en la Dirección mencionada.

En otras ocasiones, durante la administración de Renán Barrera Concha, se le intentó correr pero el trabajador hizo valer sus derechos y se le tuvo que reinstalar.

Además de su trabajo en el Ayuntamiento, Ayuso Cambranis es entrenador deportivo y es una persona que, pese a su discapacidad, le gusta valerse por sí mismo y ser una persona independiente que no depende económicamente de nadie para mantenerse. Es licenciado en computación.