Los amigos de lo ajeno Luis Antonio Hernández Contreras y Lila Michel Sarrasino Cortazar pidieron llegar a un acuerdo reparatorio con su víctima que pasar más tiempo con los brazaletes electrónicos que les impusieron.

Los sujetos se presentaron a dicha audiencia y prácticamente hicieron asistir a la fuerza a la víctima, señora Patricia Calderón Souza, quien vive en Quintana Roo y es una mujer de edad avanzada que se desplaza en silla de ruedas, además de que padece otras enfermedades.

Dicha audiencia fue celebrada ante la juez segundo de Control del Primer Distrito Judicial, Blanca Beatriz González Bonilla, luego que esta pareja fue vinculada a proceso por el delito de robo con violencia, tras los hechos ocurridos el pasado 24 de noviembre en el centro de Mérida.

La mujer comentó que era el primer día que estaba de visita en Mérida cuando fue víctima de salvaje recibimiento que le ocasionó serios problemas de salud, que agravaron su condición y, no obstante lo anterior, en la Fiscalía General del Estado asentaron que eran lesiones que tardaban en sanar menos de 15 días.

Sin embargo, el ataque le generó gastos médicos mayores que no sabe quién los cubrirá.

Como medidas cautelares, se impuso contra la pareja el uso de un brazalete electrónico, no salir del Estado, acudir a firmar y no acercarse a la víctima ni al lugar de los hechos por el plazo de un año.

De acuerdo con la causa penal, los hechos ocurrieron el pasado 24 de noviembre por la noche, cuando los sujetos caminaban sobre la calle 61 entre 40 y 42 del centro de Mérida, presuntamente golpearon a la denunciante y le arrebataron un iPhone.

Tras los hechos, los indiciados se dieron a la fuga, pero la víctima solicitó ayuda a la Policía, logrando la localización de los involucrados y posteriormente fueron detenidos.

Por cierto, estos sujetos no es la primera vez que delinquen, ya que es su modus vivendi. “Tanto escándalo por un iPhone”, expresaron durante las diligencias.