El mercado laboral y la economía de Yucatán registran indicadores que superan el promedio nacional, lo que refleja el momento positivo que vive la entidad en su repunte financiero, la generación de nuevos empleos formales y el aumento al salario diario.

Este repunte se refleja de manera sustantiva durante el primer semestre de este año, donde el estado registró un alza considerable en su Producto Interno Bruto (PIB) del 3.7 por ciento, sobre el 2.5 por ciento obtenido por la media nacional. Dichos números vienen precedidos de un desarrollo industrial con tendencia ascendente y sostenida, lo que ubica al territorio yucateco en el cuarto lugar del país con un 8.0 por ciento de avance en primer semestre de 2016.

El proceso de reindustrialización, que promueve de manera conjunta el Gobierno del Estado y la iniciativa privada, ha sido importante como estrategia de dinámica financiera y un impulso para la llegada de más inversiones. Como ejemplo, en el renglón de la industria manufacturera, Yucatán se posiciona y redobla el paso como primer lugar con indicadores del 13.5 por ciento, siendo la única entidad del país que mantiene un crecimiento a doble dígito desde varios meses atrás.

En materia laboral, los indicadores señalan que en los cuatro años de la gestión del Gobernador Rolando Zapata Bello se han generado 51 mil 386 nuevos empleos formales de acuerdo con datos del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS). Esto supera por mucho lo realizado, por ejemplo, en el período 2001-2007, en el que se crearon en el estado 29 mil 301 fuentes de trabajo.

De igual forma, lo alcanzado durante estos 48 meses de la actual administración rebasa ampliamente las 22 mil 940 plazas laborales que se generaron entre 2007 y 2012. Es decir, lo logrado durante los últimos cuatro años entre autoridades estatales e iniciativa privada representa el 98.8 por ciento de las creadas en el ciclo 2001-2012.

Asimismo, Yucatán permanece con tendencia ascendente a nivel nacional y fincando avances en el segmento del salario diario asociado, hasta el pasado mes de agosto, presentando un incremento del 24 por ciento en los últimos cuatro años.

Ese es el caso de Cindy Cachón Medina, una trabajadora de la empresa Bachoco, quien ante el crecimiento de la planta empacadora de productos de valor agregado, este año fue elegida para recibir entrenamiento y capacitación para ocupar un puesto a nivel jefatura, lo que lleva consigo un aumento considerable en sus percepciones.

Entrevistada durante una de sus jornadas en las instalaciones de la firma en la comisaría de Ticimul, localidad de Umán, la empleada asegura que su desarrollo laboral en la compañía le otorga mejores ingresos para contar con mejores bienes, prestaciones, así como seguro para su bienestar personal y el de su familia.

En otra vertiente, José Chuc Koyoc, con 17 años de experiencia en la albañilería es parte de los 120 obreros que actualmente trabajan en las primeras fases de construcción del Centro Internacional de Congresos, que estará ubicado en la zona hotelera de la capital yucateca, hasta donde llegó después de iniciar la búsqueda de una oportunidad al quedarse sin empleo.

El ramo de la construcción es uno de los que ha contribuido a generar una importante cantidad de fuentes de trabajo, y el sector público aporta a ello a través de las cinco obras estratégicas que se edifican como el nuevo Hospital Materno Infantil, el Centro Internacional de Congresos y Convenciones, la Universidad Politécnica de Yucatán (UPY), el Palacio de la Música y la segunda etapa del Centro de Justicia Oral de Mérida (CJOM).