Agentes de la Secretaría de Seguridad Públcia detuvieron a Roberto Rojas Vadillo (a) “El Pichi” por apedrear a un carpintero vecino suyo, quien hacía mucho ruido y no lo dejaba descansar.
Pese a no ser un delito grave, el detenido fue enviado al penal porque no tuvo dinero para pagar la fianza que le fijó el Ministerio Público.
De acuerdo con el expediente, el carpintero Jorge de Jesús Estrella Sánchez lo denunció porque, según dijo, a las 19:30 horas, estaba en su carpintería de la colonia Castilla Cámara
cortando un tronco con una sierra eléctrica.
Llegó hasta su domicilio su vecino “El Pichi”, quien estaba alcoholizado y le pidió que dejara de hacer ruido porque deseaba descansar.
El carpintero siguió trabajando, por lo que el acusado le dijo que iba a traer a su banda y enseguida le lanzó una pedrada, golpeándolo en el antebrazo izquierdo.
Rojas Vadillo dañó dos columnas que el carpintero había mandado a colar recientemente, por lo que el afectado
llamó a la SSP y su vecino fue detenido.
En su declaración preparatoria, preparatoria, el acusado dijo que se tomó dos misiles con sus amigos y se fue a su casa, pero antes de llegar escuchó el escándalo de la motosierra, por lo que decidió ir a pedirle al carpintero que dejara de hacer ruido.
Sin embargo, el vecino se alteró y se hicieron de palabras, aunque aseguró que no llegaron a los golpes y ni siquiera le lanzó pedrada alguna.
Admitió que dañó las columnas porque estaba borracho y se pegó mucho a la construcción, que estaba todavía “fresca”.
Este caso no fue posible resolver por la vía de la “mediación”, por lo que llegó a los juzgados pese a ser un asunto sin tanta relevancia.