Al comparecer ayer ante un juez, los tabasqueños acusados de dar muerte a Emma Gabriela Molina Canto se negaron a rendir declaración sobre el crimen.
Sin embargo, hicieron uso de la palabra para decir que tienen miedo de sufrir represalias en el penal meridano donde están recluidos.
Los sujetos, Jonathan Mézquita Avalos Oscar Miguel López Tovilla dijeron que fueron amenazados de muerte, aunque no revelaron cómo se les amenazó.
En redes sociales, específicamente en sus cuentas de Facebook, han recibido decenas de mensajes de repudio por lo que hicieron y varios internautas les ‘advierten’ que en el penal pagarán físicamente por el crimen.
En la audiencia de ayer, como informamos en nota aparte, fueron imputado por los delitos de feminicidio, contra la salud en su modalidad de narcomenudeo por posesión simple de cocaína y portación de armas e instrumentos prohibidos.
El primer delito por el crimen de Emma Gabriela, el segundo porque al ser detenidos llevaban 9 envoltorios de “crack” y finalmente la portación de armas porque amenazaron con un cuchillo a los uniformados al momento de su captura.
Se les detuvo en la calle 71 entre 68 y 70, cuando se dirigían a la terminal Came del ADO para huir.
Recién los había llevado al Centro el taxista Manuel José Vázquez Domínguez, quien los bajó en la calle 61 con 52 luego de que le pagaron $40 por el viaje.
Ayer precisamos que un testigo presencial del crimen fue Fabián Soberanis, quien fue a comprar a la tienda “La Guadalupana”, misma a la que llegaron los tabasqueños para esperar a su víctima.
Cuando la vieron llegar, cruzaron la calle y la asesinaron de tres cuchilladas.
Fabián pasó por la casa y escuchó a la víctima gritar “auxilio, auxilio, me quieren matar”, observando que los dos sujetos que estaban ahí eran los mismos que momentos antes estaban en la tienda tomando un refresco.
Los vio salir corriendo y notó que la víctima estaba en el piso lesionada, junto a unos menores, por lo que los persiguió en su bicicleta hasta que abordaron el Econotaxi con número 007.