El juez de control de Tekax sentenció a 2 años y 4 meses de cárcel a Julio César Meceta Puc, quien fue hallado culpable de incesto.

Se acogió a un procedimiento abreviado, confesando que hizo su mujer a su hija de 14 años, con lo que no recibió una sanción mayor.

Y no la recibió porque no fue acusado de violavón, sino de incesto, que se castiga con pena corporal de 3 a 6 años de cárcel, aunque el juez le impuso una sanción ubicada entre la media y reducida en un tercio de la misma.

El sujeto no sólo mantuvo una relación incestuosa con su hija adolescente, sino que también videograbó las perversiones.

Ofrecía recompensas a su hija para que accediera a sus pretensiones y la manipuló a tal grado que ella no pensaba que estaba mal lo que hacía con su padre.

Al ser condenado, se hizo acreedor al pago de 96 días multa, se le amonestó, se le suspendieronsus derechos políticos, y se le privó de sus derechos de familia, aunque tiene derecho a conmutar la pena y quedar en libertad.

En el expediente consta que el padre degenerado tenía sexo con su hija adolescente a cambio del ofrecimiento de objetos materiales, lo que acabó afectando el desarrollo psicológico de la menor.

Meceta Puc le imponía la cópula a su hija cuando ambos se encontraban en la casa que habitaban, en la calle 26 entre 21 y 23 de Santa Elena.

Hizo esto en repetidas ocasiones, desde que ella contaba con 14 años, entre los meses de octubre y noviembre del 2015, acto que continuó realizando hasta el 29 de abril del 2017.

Se le acusó también de corrupción de menores, pero finalmente se le exculpó de este delito

El fue detenido a principios de mayo por otro motivo, ya que fue sorprendido con 55 dosis de metanfetaminas, mismas que le vendió a un alumno de secundaria.