Prefiere la cárcel en Mérida que regresar a Guatemala

El guatemalteco Minor Giovanni Dubón Velázquez fue sentenciado a un año y siete meses de prisión por haber lesionado a los custodios del Cereso que lo llevaban al Instituto Nacional de Migración para que fuera expulsado del país

El se acogió a un procedimiento abreviado, mediante el cual confesó que si cometió el ataque y a cambió recibió una condena menor.

Asimismo, se le notificó que le faltan 459 días de reclusión por compurgar su condena, pues se le descontarán los 114 que ya lleva en prisión.

De hecho, si así lo decide no los pasará presos, pues se le otorgaron beneficios, como pagar 74,649 mil pesos a cambio de no quedarse en la cárcel o cumplir 459 jornadas de trabajo en beneficio de la comunidad.

Sin embargo, quizá no los pague, pues estando libre podría ser deportado y no desea eso, tomando en cuenta que precisamente está en la cárcel porque atacó a custodios que lo llevaban a deportar.

La juez Suemy del Rosario Lizama Sánchez fue quien avaló el procedimiento.

Los hechos ocurrieron en los primeros minutos del 5 de octubre pasado, el acusado, encontrándose en el interior de la Urvan con placas YXJ-131-B, utilizando un cuchillito de fabricación casera, ocasionó diversas lesiones a los custodios Moisés y Eliodoro, pues no quería ser deportado a su país.

Las lesiones que le causó a los oficiales no son de las consideradas graves y son de las que tardan en sanar menos de 15 días.

Fue detenido por los mismos custodios lesionados.

Dubón Vázquez estaba cumpliendo una condena en el Cereso de la capital yucateca, pues tiene antecedentes penales desde 2005, cuando junto con otras personas fue procesado en el Juzgado Octavo Penal por el delito de robo y transporte de bienes hurtados, por el atraco a la empresa denominada “Polishine del Caribe”.

El 9 de octubre de 2015 fue la última ocasión en que fue detenido, por portar un arma de uso exclusivo de las Fuerzas Armadas y fue sentenciado a dos años de prisión.