En un procedimiento poco frecuente, el gobierno del Estado aseguro una veintena de viviendas populares en un fraccionamiento de Progreso,

A través del Instituto de Vivienda del Estado de Yucatán (IVEY), se realizó el aseguramiento de las casas que estaban abandonadas en el fraccionamiento Campestre Flamboyanes.
Se averiguó que el aseguramiento de las viviendas se realizó en base a que están deshabitadas desde hace varios meses.
Algunas viviendas llevan un año en el abandono, desde octubre de 2011, cuando fueron otorgadas por el gobierno anterior.
El procedimiento llama la atención porque son viviendas populares y generalmente los gobiernos no actúan contra las clases más necesitadas.
Sin embargo, las investigaciones del Ivey revelaron que varias de estas casas fueron entregadas a personas que no las necesitan y, por lo tanto, nunca las habitaron.
Personal de la Dirección de Vivienda del IVEY llegó ayer alrededor de las 11:30 de la mañana al fraccionamiento y luego de una inspección ocular, procedió a colocar sellos de aseguramiento en las puertas de los predios.
Casi todas las casas se encuentran entre maleza porque están completamente abandonadas.
El operativo se realizó en la parte nueva del fraccionamiento, donde el gobierno de Ivonne Ortega, reubicó a 321 familias que vivían en la ciénaga de Progreso.
En los sellos que se colocaron se señala que las viviendas ya son propiedad del Ivey y que se consignará a quien las ocupe sin autorización.