En su adolescencia mató a un rapero y ahora roba iglesias

Al continuar el proceso en su contra, a los ladrones sacrílegos Jesús Humberto Kantún Gutiérrez “El Coco” y Diego Eduardo Briceño Ancona (a) “El Triste”, se les negó la libertad bajo fianza tras haber sido detenidos por robar en la iglesia de San Cristóbal.

La juez de control Blanca Beatriz Bonilla González les impuso la medida cautelar de prisión preventiva por el delito de robo calificado, por todo el tiempo que dure el proceso y estableció que el cierre de investigación complementaria sea en un mes.

Ambos cuentan con amplio historial delictivo. “El Coco” fue en su adolescencia un pandillero, integrante de la banda “El Silencio”, del sur de la ciudad, y hace años estuvo implicado en la muerte del rapero yucateco Jonathan Alberto Puerto Gutiérrez (MC Chicharra), pero quedó en libertad al poco tiempo porque fue juzgado como menor de edad.

“El Triste” también cuenta con su historia, con varios ingresos a la cárcel por delitos derivados del consumo de alcohol y las drogad.

Estos sujetos fueron denunciados por Alejandro Rosado Reyes, en su carácter de apoderado legal de la Arquidiócesis de Yucatán.

Como informamos, a eso de las 00:40 horas del 20 de noviembre, “El Coco” y “El Triste” se introdujeron a la oficina parroquial de la iglesia Nuestra Señora de Guadalupe, ubicada en la calle 69 entre 50 y 50-A, que estaba cerrada.

Llegaron a la oficina parroquial y se apoderaron de un desarmador, una tijera, un cutter, un reloj, una cartera, 5,140 pesos en efectivo, un disco duro, 5 playeras y una lap top.

Sin embargo, fueron descubiertos por el párroco José Candelario, quien dio parte a la Policía Municipal de Mérida, cuyos elementos acudieron y detuvieron a los sujetos, quienes seguirán presos porque se tomó en cuenta que tienen amplio historial delictivo.