Los hermanos Violeta Fidelina y René Francisco Esquivel Dzib obtuvieron tres propiedades en un juicio de sucesión intestada.

Sin embargo, como se negaron a pagar míseros $5,000 por concepto de liquidación de las deudas de los predios, motivo por el cual hoy fueron procesados por desobediencia.

Fue el Juzgado Tercero de Oralidad Familiar el que interpuso la denuncia contra los hermanos y la juez de control Ileana Georgina Domínguez Zapata la que los imputó por el delito de desobediencia de particulares a un mandato judicial.

Debido a que no es un delito grave, los hermanos no se quedaron en prisión, pues se les impuso acudir a firmar y no salir del Estado sin autorización judicial, hasta la audiencia de vinculación que tendrá lugar el 15 de enero.

El expediente del caso indica que el 23 de octubre de 2015 se inició en el Juzgado Tercero de Oralidad Familiar el expediente 987/2015 relativo a un Juicio de Sucesiones Unidas Intestadas, en el que se dictó sentencia 13 de septiembre de 2016.

Se repartió la herencia entre los hermanos y otras personas, pero se les ordenó liquidar los adeudos que tenían los tres presos.

El 6 de septiembre de 2017 se les previno para que en el término de quince días hábiles depositaran 1,775.34 pesos y 887.67 pesos cada uno en concepto de liquidación de las deudas que pesan sobre los inmuebles de la sucesión.

Pese a que se les apercibió que de no cumplir se les impondría una multa de 20 unidades de medida y actualización, no depositaron el dinero.

El 24 de noviembre de 2017 se les hizo efectivas las multas, y se les requirió el dinero, con la advertencia que de no hacerlo se consignaría el caso al Ministerio Público por desacato a un mandamiento judicial.

Ni así cumplieron, por lo que se les denunció y hoy fueron presentados ante el juez