Suspensión de notario Goff Rodríguez, ajena a mafia mobiliaria

La suspensión de Carlos Goff Rodríguez no tendría relación con la mafia inmobiliaria que opera en el estado, sino con la queja de un particular por la compraventa de un predio cuya escritura presuntamente el fedatario no elaboró.

Sin embargo, en el caso se involucra directamente el Consejo de Notarios, pues cometió una omisión en la investigación, lo que permitió que el notario quedara como “el malo de la película”.

El particular interpuso una queja ante el Consejo de Notarios, que le dio la razón pese a que el fedatario exhibió un documento en el que el propio denunciante lo eximía, pues el asunto ya se había resuelto.

Según se averiguo en círculos notariales, el caso data de 2012, cuando un particular contrato los servicios del notario Goff, pero no volvió por su documentación, sino hasta cinco años después, cuando reapareció y exigió la finalización del trámite que habría contratado.

Fue entonces que señaló que el inmueble tenía un embargo de 15 mil pesos, solicitando una copia certificada para promover un amparo a fin de combatir el embargo.

Sin embargo, uso esa copia para interponer la queja ante el Consejo que derivó en la suspensión del notario anunciada este jueves.

El notario Goff Rodríguez argumenta que exhibió la carta donde lo eximía de responsabilidad porque se había resuelto el asunto, cosa que no tomó en cuenta el Consejo de Notario.