El Magistrado federal Jorge Arturo Camero Ocampo, suspendido en octubre pasado para ser investigado por presuntas inconsistencias de más de 80 millones de pesos en su patrimonio, falleció este lunes en la Ciudad de México.
Murió por cáncer de páncreas y fue velado en la funeraria J. García López del Pedregal al sur de la CDMX.

Fuentes federales confirmaron el deceso del magistrado que ocupaba un lugar en el Décimo Tribunal Colegiado en materia Administrativa en la Ciudad de México, hasta antes de su suspensión decretada el 10 de octubre de 2019 por supuestamente registrar inconsistencias ‘graves’ en sus finanzas.

Al momento de su suspensión, el magistrado conocía de recursos de quejas y revisión derivados de los amparos contra la construcción del Aeropuerto de Santa Lucía.

Este funcionario estuvo en Yucatán, donde prácticamente inicio como juez federal, permaneciendo tres años en el estado.

Fue nombrado magistrado de Circuito el 11 de septiembre de 2000 y en febrero de 2005 presidente del Colegio Nacional de Magistrados de Circuito y Jueces de Distrito del Poder Judicial de la Federación; en octubre del mismo año resultó electo presidente de la Asociación Iberoamericana de Jueces, Fiscales y Juristas de la Propiedad Intelectual (AIJUPI) en la ciudad de Munich, Alemania.

El fue juez Primero de Distrito en Yucatán, entre 1995 y 2000, y después ocupó el mismo cargo en Quintana Roo y el Distrito Federal. 

Sin embargo, fue señalado ahora como presunto líder de una red de corrupción. 

El tuvo relación con los amparos contra la construcción del aeropuerto de Santa Lucía, donde había mantenido criterios favorables a la suspensión de esa terminal, aunque también emitió algunos fallos en contra de dicha medida.

En su momento se dijo que tenía una casa en Paseos del Pedregal con valor de 17.8 millones de pesos -equivalentes al total de sus ingresos de los últimos 6 años-, la cual pagó de contado, pero no estaba a su nombre, sino de uno de sus hijos.