Los ricos también lloran… y pelean en público

Un pleito entre personas pudientes se vivió ayer en los juzgados de Oralidad Familiar, donde se desahogaba el divorcio entre Ermilo Javier Castilla Roche y Margarita del Pilar Ponce Díaz, ya que uno de los cuñados del primero lo agredió verbalmente y a golpes.
De acuerdo con el propio Castilla Roche, en las agresiones e intimidaciones participaron otros familiares de su ahora ex esposa, además del cuerpo de seguridad de la familia Ponce Díaz, una de las más acaudaladas de la Península de Yucatán.
Tras la agresión a golpes, de la que señaló directamente a su ex cuñado Roberto Ponce Díaz, el agraviado interpuso una denuncia en la Fiscalía General del Estado.
Los hechos ocurrieron en el Juzgado Tercero de Oralidad Familiar del Poder Judicial del Estado, donde se realizó una audiencia de demanda de divorcio interpuesta por Margarita del Pilar Ponce Díaz.
En receso de la diligencia, Roberto Ponce agredió a su ex cuñado en el área de sanitarios de dicho juzgado, al que le propinó varios golpes en la nuca y en la cara.
De acuerdo con el denunciante, desde su llegada a la audiencia recibió intimidaciones de otros familiares de su ex esposa, además del cuerpo de seguridad de la familia Ponce, encabezado por Francisco Calero Rosado, quien director de la Policía Municipal de Mérida y ahora es «guarura» de Bepensa.
Según sus declaraciones, las amenazas no fueron solo contra su persona sino también contra sus abogados, a lo que Roberto Ponce les dijo que les arruinará sus carreras profesionales, porque «no saben con quien se están metiendo».
Roberto Ponce fue detenido por agentes de la SSP, los cuales también recibieron amenazas de que serían cesados.
Finalmente, después del bochornoso incidente, quedó disuelto el vínculo matrimonial entre Castilla Roche Margarita Ponce.

1 thought on “Los ricos también lloran… y pelean en público

  1. Los ricos también roban, hacen ridiculeces, pagan miserias a sus empleados, explotan al obtrero, se enriquecen a nuestras costillas, todas esa linduras hacen los ricos… y no quieren que los pobres lloren

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