Agentes de la Policía Municipal de Progreso detuvieron a Luis Enrique de la Cruz López luego de que se robara dos conos de un retén alcoholímetro y le pegara a tres policías, incluyendo a una mujer.
Por este motivo, el violento sujeto fue consignado al Juzgado Séptimo Penal, acusado de lesiones contra servidores públicos, por denuncia del agente Pablo Belmonte Leyva, miembro de la Policía Municipal de Progreso.
Según las constancias del expediente, el domingo pasado a las 12:45 de la noche, Luis Enrique se dirigía caminando a su casa y pasó por la calle 33 entre 46 y 48 de la colonia Ismael García, donde había un retén alcoholímetro.
Los agentes no le dijeron nada porque no obstante que estaba ebrio, no iba manejando vehículo alguno.
Sin embargo, sorpresivamente el sujeto tomó los dos últimos nonos del retén y salió corriendo, siendo perseguido por la agente Marisol Chalé Campos.
Para correr más rápido, Luis Enrique lanzó los conos al frente de una casa, pero aun asó le dio alcance el policía Pablo Belmont, quien salió ayudar a su compañera.
Para mala fortuna del agente, Luis Enrique lo recibió con un puñetazo y luego hizo lo mismo con la mujer policía.
También tuvo una dosis especial para un tercer uniformado, hasta que otro grupo de policías llegó y lo sometió a la fuerza.
Fue remitido a la cárcel de Progreso y de ahí al Ministerio Público para su posterior remisión al penal meridano.
Al dar su testimonio, el detenido dijo que estaba muy ebrio y lo único que recuerda es haber tomado los dos conos, pero que lo hizo por puro relajo.
Indicó que se dedica a la venta de cervezas y el día de los hechos estuvo tomando casi todo el día, por lo que no recuerda lo que hizo al anochecer, aunque consideró poco probable que hubiera podido golpear a tres policías él solo.