Los festejos en honor a la Santa Cruz terminaron de manera trágica en una pequeña comunidad del oriente de Yucatán, donde un hombre le disparó a otro y luego se suicidó pensando que lo había matado.

Los hechos ocurrieron en Xanlah, comisaría de Chankom, donde un joven llegó a un festejo que organizaron sus familiares en honor a la Santa Cruz en casa de sus parientes y se hizo de palabras y hasta de golpes con sus primos porque no le quisieron invitar una «caguama».

Molesto, salió del festejo para ir a buscar su escopeta , con la que regresó y amenazó a los invitados, incluso hizo un disparo al aire.

Sus parientes lograron calmarlo y se le expulsó de la celebración, pero en el camino se encontró con uno de sus primos, el organizador del festejo, discutieron y le disparó a quemarropa.

Al ver lo que había hecho y que iban sobre él sus parientes corrió hacia una rejollada detrás de la iglesia, donde se suicidó de un tiro en el abdomen.

Al lugar llegaron policías de diversas corporaciones y el Servicio Médico Forense, que levantó el cadáver.

Por su parte, el herido fue trasladado en el vehículo del comisario municipal hasta el entronque con la carretera a Chankom, donde lo entregaron a una ambulancia que lo llevó al hospital general de Valladolid.

De acuerdo con gente de la comunidad, es la segunda ocasión que ocurre un hecho similar, pues hace 10 años un hombre se suicidó al suponer que había matado a su víctima.