Pasaría varios años en prisión por apuñalar al ladrón que se metió a su tienda

Por hacerse justicia por su propia mano, Luis Fernando Buenfil Herrera se metió en un gran problema luego de que hiriera mortalmente a una persona que presuntamente intentó robar en el negocio de su esposa.

Buenfil Herrera enfrenta ahora proceso por un delito grave, ya que dejo muy mal herido al presunto ladrón y pasaría muchos años en la cárcel si no comprueba que fue accidental, como argumentó hoy al rendir su declaración preparatoria.
Se le acusa de golpearle la cara con una piedra y apuñalar al presunto ladrón, quien por su parte niega haber robado.
Es procesado en el Juzgado Quinto Penal por el delito de
tentativa de homicidio calificado, por denuncia de Miguel Angel López Gamboa, quien también enfrenta cargos porque presuntamente si cometió el hurto que le atribuye su victimario.
El presunto ladrón dijo Miguel Angel relató que el lunes pasado se encontraba tomando cervezas en su casa porque era el aniversario de bodas de sus papás y luego fue a la boutique “Emiré”, de la calle 51 entre 42 y 44 de la colonia Fidel Velázquez.
Le preguntó a la empleada por una playera sin mangas y ella le dijo que no tenía una como la que quería.

Al salir, fue atacado en la cara con una piedra al caer al suelo, el agresor lo montó y le clavó una navaja en el abdomen.
Dijo que mientras lo apuñalaba le gritaba “entrega lo que te robaste o te mato”.
Al sitio llegó la policía y detuvo al agresor mientras que el agredido fue llevado de urgencia a un hospital, aunque también en calidad de detenido.
Al rendir su declaración preparatoria, Buenfil Herrera dijo que estaba en su casa de la colonia Pacabtún y la empleada de la boutique Cristina Concepción Koyoc Chuil le habló para decirle que un sujeto había robado tres pantalones de la tienda, propiedad de su esposa Sandra Ivonne.
Se fue al sitio, pero no encontró al ladrón, aunque cruzó a una lavandería a averiguar más detalles y desde ahí observó cuando la empleada de la boutique era amagada con una navaja por el ladrón, que presuntamente había regresado.
Dijo que observó cuando el sujeto escondía ropa y se le fue encima, lo sometió por el cuello y forcejearon.
Cayeron al suelo y ahí logró sujetar al ladrón poniéndole una rodilla en la espalda.
Le dio tres puñetazos en la cara, pero cuando cayó al suelo el preusnto ladrón se clavó solo la navaja, aunque él no lo lesionó.
La situación es complicada porque el preusnto ladrón tiene heridas que ponen en peligro su vida. (Acom)