La Fiscalía consignó ante un juzgado de oralidad a Alejandra Evelin Gamboa Barrera, acusada de defraudar más de dos millones de pesos a «Librerías Dante”

A la mujer, quien fungía como auxiliar administrativo de la empresa, se le formuló imputación por el delito de fraude genérico.

Sin embargo, la juez de control Blanca Beatriz Bonilla González no la dejó en prisión, pues le concedió la libertad condicional a cambio de acudir a firmar, someterse a vigilancia ante el Centro Estatal de Medidas Cautelares, y la prohibición de salir del Estado sin autorización.

Según el expediente, Gamboa Barrera empezó a laborar en la empresa como auxiliar administrativo en 2006.

Se encargaba de elaborar cheques y entre sus demás funciones estaba la reposición de la caja chica, efectuar los pagos a proveedores y el manejo de las cuentas bancarias.

Sin embargo, en abril del 2015, se hizo una revisión aleatoria de la contabilidad y se detectó que estaban repetidos algunos cheques y fue como se supo que la empleada pasaba facturas para aprobación de la gerente, pero posteriormente ponía la cantidad total, sobrando siempre 4 mil pesos, pero alegando que era para cubrir otros gastos, aunque en realidad eran para su beneficio particular.

Un arqueo a los vales por reembolsar arrojó un faltante de 647,051 pesos y al ser cuestionada admitió que lo usó en su provecho, ofreciendo reponer el dinero, pero lo que hizo fue retirarse de su centro de trabajo el 15 de abril de 2015 y ya no volvió.

Posteriormente, en la revisión de los vales de gasolina, se detectó un faltante de un millón 132,550 pesos.

Los cheques formaban parte de la persona moral denominada “Jardín Jurassico”, propiedad de la misma persona física, y ahí se descubrió un faltante de 217,761.08 pesos.

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