Por enfermedad de su abogado, ayer se prórrogo hasta el 20 de diciembre la audiencia intermedia para juzgar los sicarios tabasqueños Jonathan Mézquita Avalos y Oscar Miguel López Tovilla, presuntos autores materiales del crimen de Emma Gabriela Molina Canto.

David Araba Dorantes Cabrera, defensor de los sujetos, presentó un certificado médico en el que indica que tenía problemas de salud.

El certificado fue e pedido por Carlos Castro Aguilar, quien avala que el abogado no se encuentra en condiciones idóneas para trabajar.

Tendría que guardar reposo 4 ó 5 días, incluso se indica que estuvo internado en el área de urgencias de la Clínica Mérida.

El juez accedió a dicho aplazamiento, al que no se opusieron la Fiscalía General del Estado, los coadyuvantes de las víctimas indirectas y sus asesores.

De hecho, la Fiscalía alegó que también iba a buscar un aplazamiento para presentar todas sus pruebas, por lo que se adhirió a dicha solicitud.

Al reprogramarse la audiencia, ese mismo día también habrá de efectuarse la audiencia intermedia de Rogelio César Reyes Barrueta (a) “Huero”, el presunto intermediario en la contratación de los sicarios para dar muerte a Molina Canto, supuestamente por encargo del ex esposo de la mujer, Martín Alberto Medina Sonda.

En la audiencia intermedia, los implicados decidirán si son sometidos a un juicio oral o se atienen a un procedimiento abreviado.

En el primer caso pactarían una condena baja, al menos no recibirían el tope de 40 años de cárcel que establece el delito de homicidio calificado, que es el que se les atribuye, además de contra la salud y portación de armas e instrumentos prohibidos.